Integrantes de la Canirac buscarán una reunión con otras cámaras empresariales para conformar un frente y buscar diálogo con las autoridades en dado caso que se vuelva a cerrar los negocios no escenciales ante el posible regreso a semáforo rojo.

En entrevista el miembro de Canirac, Castañeda Roldán dijo que es necesario hacer un frente para generar conciencia porque de llegar a tener un cierre definitivo, les volvería a pegar de manera importante.

Comentó que independientemente de que sean la primera línea de los establecimientos, cerrar los mismos habrá de impactar de gran manera.

De ahí la importancia de que todos los agremiados sigan con la sana distancia, que no aflojen el paso que esto en realidad podría podría proveer una segunda oleada de contagios.

Mencionó que al interior de los negocios o restaurantes se mantiene la seguridad sanitaria, que se aplique el control de la temperatura, la limpieza de los lugares, el uso de gel y cubrebocas.

De cerrar los negocios, dijo que van a perecer bastante porque los aumentos vienen duros y la cuesta de enero genera la disminución de clientes, aunado a la competencia desleal con el comercio informal y a esto se suma el costo del embalaje; "eso es carísimo, el material que vamos a estar ocupando, si nos imponen vender solo para llevar, no, no vamos aguantar, muchos van a cerrar y ya hay una ley y ya han habido multas y ciertamente sentimos el cuello muy justo".