En la total indefensión quedaron las mujeres de la zona serrana de Zongolica y Orizaba que han sido víctimas de violencia, esto al cerrarse los refugios, debido a la falta de apoyo por parte del Gobierno que enviaba recursos para sostener estos centros de ayuda, expuso la coordinadora de la Asociación Civil Kalli Luz Marina, Lizet Hernández.

Mencionó que hace unos meses cerró el refugio que se encontraba en la zona de las altas montañas, en este espacio se daba alojamiento, además de apoyo jurídico y psicológico a mujeres de las zonas serranas, quienes ahora han quedado en el desamparo ante el recorte presupuestal del Programa de Apoyo a Instancias de Mujeres de las Entidades Federativas (Paimef).

“Es un problema gravísimo en el sentido de que hay mujeres que literalmente no tienen a donde ir, no tienen una red de apoyo familiar, no hay una red de apoyo entre sus amistades, ni siquiera en la comunidad y entonces eran mujeres que en esa situación donde estaba en riesgo su vida eran canalizadas a estos refugios que brindaban refugio, atención psicológica, representación legal, y en los que incluso se aceptaban a sus hijos”.

La abogada señaló que es lamentable que el Estado haya dejado de lado su responsabilidad hacia este sector vulnerable.

“Es demasiado preocupante y como decía, lo primero es etiquetar recursos, porque existe un anexo dentro del presupuesto federal que obliga al Estado de alguna manera a etiquetar recursos para la reducción de las desigualdades entre hombres y mujeres”.

Apuntó que con el tema de la pandemia, mucho de ese recurso se canalizó al tema de salud, que es comprensible, sin embargo el tema de violencia representa un problema de salud pública.

“Hubo una reducción de los recursos de Paimef, había atención que se brindaba de manera itinerante en todo el estado de Veracruz y aparte de dañar la atención, también se dañó la promoción de los derechos de las mujeres”.