En respuesta a un llamado de auxilio, miembros del H. Cuerpo de Bomberos acudieron al Edificio Nachita para abordar una fuga de gas, la cual, según el oficial Carlos Mejía, no representó ningún riesgo para la población.

Mencionó que la fuga ocurrió durante la carga de gas, donde la válvula quedó levantada, permitiendo la salida del combustible tras el llenado de un tanque estacionario.

El oficial declaró que el repartidor podría haber dejado la válvula levantada con la línea de llenado cargada, generando alarma entre los residentes.

Mencionó que aunque en este percance no hubo accidentes es necesario que la población sea más cautelosa durante el proceso de llenado de tanques estacionarios, especialmente en la temporada de calor.

"Es crucial tener precaución y realizar una revisión de las instalaciones, ya que muchos tanques están ubicados en azoteas y espacios abiertos", advirtió el bombero. Además, destacó la importancia de examinar las instalaciones, ya que, al ser de cobre, la exposición al sol y al agua puede desgastar los materiales, provocando fugas.