Un hallazgo poco usual alertó a los automovilistas que transitaban la carretera La Piedad-Yurécuaro, a la altura de la comunidad conocida como Monteleón, en Michoacán. A la orilla de la cinta asfáltica había decenas de bultos de los cuales emanaba un fétido olor, por lo que pensaron serían restos humanos, pero al llegar la policía local se dieron cuenta que eran tiburones sin aletas ni cabezas. Los animales estaban envueltos en costales, en total son 48 tiburones grandes y 250 pequeños, se desconocen más detalles del caso y cómo llegaron a la orilla de la carretera. Los tiburones fueron trasladados en una grúa hasta las instalaciones de la Procuraduría General de la República, a quienes por competencia les corresponde continuar con la investigación por un delito contra la biodiversidad. De manera extraoficial, las autoridades locales información que algunos testigos indicaron desde un vagón del ferrocarril que pasa por este sitio fueron arrojados los 298 tiburones. |