La tarde de este sábado, elementos policiacos se enfrentaron con algunos aficionados del Necaxa en el Estadio Azteca durante el partido del Cruz Azul contra Necaxa, provocando, de nueva cuenta, un episodio de violencia en el inmueble.

Esto ocurrió después de que los elementos de seguridad le pidieran a un grupo de aficionados (que se colocaron en la cabecera norte del Coloso de Santa Úrsula) que se retiraran ya que, a partir del incidente ocurrido en el Estado Corregidora del Querétaro el pasado 5 de marzo, están prohibidas las barras visitantes de aficionados.

Gran parte de las personas que se encontraban en este sitio venían con niños o iban familias completas, por lo cual consideraron más delicada la situación Además, la modificación realizada al reglamento de la Liga Mx prohíbe las barras o grupos de animación visitantes, precisamente para evitar conflictos.

“En diferentes ocasiones se les llamó a conservar el orden; no acataron las indicaciones y mostraron actitud agresiva, razones por las que, priorizando la integridad del resto de los aficionados, se les retiró del inmueble”, se lee en el comunicado.

Sin embargo, no se pudieron evitar los brotes de violencia, pues las personas que se encontraban presentes argumentaban que no eran una barra de animación del Necaxa, sino simples aficionados que querían disfrutar de uno de los partidos de su equipo.

Afortunadamente no se reportan heridos, aunque algunos usuarios sí hablaron de golpes y jalones por parte de la policía que resguardaba el recinto.

No es la primera vez que surge violencia en el Estadio Azteca. El pasado 24 de abril también hubo un choque entre seguidores del Atlético San Luis y la policía que terminó en trifulca.