Alrededor de 200 aficionados del Atlas encendieron veladoras en el exterior del estadio Jalisco y pidieron paz para el futbol mexicano tras los disturbios que se registraron durante el partido Querétaro vs Atlas.

Los asistentes gritaron consignas de apoyo a los aficionados afectados y realizaron oraciones.

El gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, llegó al lugar y tildó de “terrible” la violencia en el estadio Corregidora. Además, detalló que dialogó con el gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri, quien le confirmó que no hay personas muertas.

Agregó que tuvo contacto también con el dueño del Atlas, Alejandro Irarragorri, a quien le ofreció todo su apoyo para la atención de los ciudadanos que viajaron al juego que son escoltados para su regreso a Guadalajara.

Los aficionados llegaron a Guanajuato, acompañados por autoridades de ese estado y, a su llegada a la frontera con Jalisco, los elementos policiales los resguardaron. El equipo también salió escoltado del estadio.

En sus redes sociales, el mandatario anunció que el titular de la Secretaría de Seguridad Jalisco, Juan Bosco Agustín Pacheco Medrano, está en comunicación directa con la Secretaría de Seguridad de Querétaro y puso a disposición los helicópteros del estado para usar en caso de que se requiera trasladar heridos.

Un grupo de atlistas y representantes del club viajaron a Querétaro para identificar a los heridos, que se menciona son cinco, quienes presentan un estado de salud delicado.