De acuerdo con el vocero de la Diócesis de Orizaba, Helkyn Enríquez Báez es necesario que las autoridades federales apliquen estrategias para poder amortiguar el impacto económico que se tendrá para el siguiente año, y así poder proteger a los que menos tienen.

“Esperamos que se tomen las medidas necesarias para proteger sobre toda la población más vulnerable, que son los que resultan más afectados; que se fortalezca e incentive la inversión a la pequeña y mediana empresa para fortalecer las fuentes de trabajo”.

El presbítero dijo que existe una gran incertidumbre por la situación económica para el próximo año, y este es a nivel mundial no sólo en México, derivado de los diferentes factores, por lo que se deben tomar las medidas correctas para amortiguar ese impacto.

Asimismo, expuso que cada persona debe ser responsable en el manejo de su economía, ya sea individual o familiar y esto es para evitar contraer deudas que después resultan impagables.

De ahí que exhortara a los ciudadanos a evitar gastos superfluos aún de las personas con la posibilidad de hacerlo, pues debe ser un acto de solidaridad con aquellos que menos tienen.

“Sabemos que sí se avizora una crisis mundial, pero las crisis a pesar de ser mundiales, repercuten en cada país de acuerdo a los manejos económicos y políticos que se realicen, las decisiones que se toman, y el modo como se afronta”.

El Vocero Diocesano señaló que se debe hacer todo lo necesario para no perder más empleos y exhortó a acuñar con los criterios necesarios para que no haya despidos masivos que afectan a las familias, “o que afecten la economía del país y a nosotros como población”.