El confinamiento, así como el distanciamiento social generados por la pandemia del virus SARS-CoV-2-, generó que tanto infantes como adolescentes presenten afectaciones en su salud mental, generado a la falta de integración social.

De acuerdo a la directora nacional de ChildFund México, Sonia Bozzi, los 18 meses de la presencia del virus en el país, también ocasionó que los menores fueran víctimas del incremento de violencia intrafamiliar, homicidios, suicidios, ingreso a las adicciones y embarazos en adolescentes. 

“Según cifras de la Secretaría de Gobernación Federal, el confinamiento y distanciamiento social ya se muestra que ha traído afectaciones serias para niños y niñas y adolescentes, afectaciones en su desarrollo por la falta de integración social, afectaciones en su proyecto de vida por la deserción escolar y la desigualdad que se ha aumentado”, aseveró.

Apuntó que por esta razón, se busca este año implementar en el Estado, el Programa de Intervención Psicoeducativa para la Recuperación Psicosocial de Niños, Niñas y Adolescentes, mejor conocido como “Colección de Apachachos”, que se llevará a cabo en siete Estados de la República, donde se concentra el 50 por ciento de la población en pobreza o pobreza extrema y el 60 por ciento de población indígena.

"Veracruz , será el primero con un curso en el que participaron 375 maestros que acreditaron los requisitos para obtener la certificación como facilitadores de la colección y en la tercera generación ya participan más de 60 docentes".

Este programa tiene dos componentes, por un lado un diagnóstico iniciak y final con la herramienta de termómetro de las emociones, lo que permitirá al maestro facilitador la identificación de situaciones de larga ante posibles situaciones de violencia que haya vivido un niño o niña. 

Por el otro, la conformación de la red de referencia para que los maestros frente a grupo puedan detectar situaciones de riesgos en este sector, así como que sepan a qué instancia deben referir los casos identificados con alarma de daños más profundos o con factores de riesgo. 

Finalmente, Sonia Bozzi aclaró que no se trata de una herramienta terapéutica, si no un acción de contención.