Cual samurái peleando y resistiendo por su señor, así resistió el pueblo japonés a los embates del coronavirus en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. La trigésima segunda edición de los Juegos Olímpicos llegó a su final, en una edición que pasará a la historia como la primera en realizarse en medio de una pandemia y la primera en celebrarse sin público en las gradas. Tras 17 días de competencias de alto rendimiento, los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 se hacen a un lado para abrirle paso a los Juegos Olímpicos de París 2024, no sin antes hacer una escala en los Juegos Paralímpicos, que se realizarán semanas más tarde. Pese a celebrase un año más tarde de lo planeado, Japón volvió a dar muestras de su resistencia y aguante para organizar una justa veraniega en medio de una pandemia. Tal y como sucedió en 1964 cuando Japón quiso demostrar que estaba preparado para albergar unos Juegos Olímpicos 20 años después de la Segunda Guerra Mundial, los nipones volvieron a demostrar su capacidad y fortaleza para resistir a una pandemia que puso en jaque al deporte mundial. Gracias a una extraordinaria logística y estrictos procedimientos sanitarios, Tokio 2020 dijo adiós para que los Juegos regresen a Europa, tras casi 12 años cuando el Reino Unido y Londres albergaron la justa olímpica en 2012. Pese a la pandemia y al descontento de un sector de la población, los japoneses demostraron que sí se podrían llevar a cabo un evento de este tamaño, aunque se tomaran medidas drásticas que afectaron a las arcas económicas como no contar con público en las gradas. Quizás, lo más sencillo hubiese sido cancelar los Juegos Olímpicos, sin embargo, el pueblo nipón logró sacar adelante esta justa y poner al deporte en la boca del mundo, siendo los ‘Juegos de la Esperanza’. Ahora, la estafeta queda en manos de París que espera recibir al mundo con los brazos abiertos y con público en todas las sedes. Con solo tres años por delante, la capital parisina se prepara para relevar a Tokio que será recordada como la ciudad que batalló y aguantó valerosamente los Juegos Olímpicos en medio de una pandemia. |