En varios Estados de la República se ha registrado un repunte de contagios por la COVID-19, después que durante cuatro meses consecutivos se vio una reducción de casos, por tanto, se han encendido las alarmas ante una temida “tercera ola”.

Hasta este momento, se han registrado 231 mil 500 decesos y casi 2.5 millones de contagios oficiales, por lo que, con dichas cifras, México se posiciona como el cuarto país del mundo con más muertos, solo por detrás de Estados Unidos, Brasil y la India.

Sin embargo, la última semana se contabilizó un aumento promedio del 9 % en la transmisión del virus, y prevén cerrar esta semana con un incremento mayor al 15 %, rompiendo definitivamente la racha de descenso de la enfermedad.

El repunte comenzó semanas atrás en los turísticos estados de Yucatán, Quintana Roo y Baja California Sur, con apenas restricciones para el turismo internacional, pero ya se ha extendido en otras regiones como Sonora, Sinaloa, Tabasco y Tamaulipas.

México sufrió un primer pico de contagios en julio del años pasado y descendieron para después dispararse en enero, principalmente en la Ciudad de México, pero, ahora, el estado de Quintana Roo, que alberga a Cancún, y Baja California Sur, en el Pacífico mexicano, ya registran mayores contagios diarios que en el pico de enero.

“Una nueva oleada pudiera ser, pero la realidad es que no tenemos capacidad de predecirlo. Sencillamente lo claro es que sin medidas suficientes de control sí vamos a tener un repunte importante”, advirtió a EFE el consultor de salud Xavier Tello.

Además, Tello consideró que a raíz de los mensajes optimistas del Gobierno ante el ritmo de vacunación “la gente piensa que la pandemia va de bajada y estamos venciendo la pandemia, pero eso no es correcto”.

Lo anterior, porque, el consultor consideró que la vacunación todavía es insuficiente para frenar la pandemia y por ahora solo cabe esperar a que haya “menos muertos de ancianos”, pues la mayoría completaron ya su inmunización.