En menos de un año la pandemia del coronavirus borró del mapa casi un tercio de las rutas aéreas mundiales y en México provocó un desplome calculado en 52 por ciento en la llegada de turistas internacionales, que pasaron de 45 millones en 2019 a poco más de 21.6 millones para el cierre de 2020. Además, a pesar de que varias naciones han comenzado la vacunación contra el SARS-CoV-2, la pandemia no cesa, a medida que los contagios aumentan y las economías vuelven al confinamiento tras la llegada de nuevas cepas que se contagian con mayor rapidez y que han provocado nuevos cierres de fronteras en algunos países y de nuevo la paralización del turismo. Para este año, la ‘industria sin chimeneas’ reajustó sus pronósticos para el futuro, esto mientras miles de trabajadores del sector han perdido sus empleos o se han quedado sin ingresos por el nuevo cierre. La Secretaría de Turismo (Sectur) estimó que este año el arribo de turistas internacionales al país en el escenario más optimista alcanzaría los 42.7 millones de viajeros, una cifra aún 5 por ciento debajo de los niveles presentados antes de la pandemia del SARS-CoV-2 en 2019, cuando México recibió 45 millones de viajeros foráneos. Sin embargo, la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés) y organismos empresariales en el país, prevén que la recuperación de los viajeros internacionales a niveles previos al COVID en México se dará hasta el 2024. Rafael García, presidente de la Asociación de Hoteles de la Ciudad de México (AHCDMX), opinó que en el primer trimestre de este año será difícil para los empresarios del sector porque no hay clientes que atender debido al nuevo ‘tope’ de actividades de esparcimiento y a la poca afluencia de viajeros de negocios. García explicó que el panorama para este año aún resulta complicado, pues a partir del primer trimestre, los hoteleros que recibieron préstamos al inicio de la pandemia deberán amortizar los primeros pagos y no cuentan con el flujo necesario para hacerlo. “Para los hoteleros, el primer trimestre no vamos a pasar del 25 por ciento (de ocupación) y el segundo no vamos a pasar del 30 por ciento de ocupación, tratando de cerrar el año con un 40 por ciento, esto con optimismo. Es un panorama complicado para el año que inicia”, señaló García en entrevista para El Financiero. En el escenario medio o conservador, la llegada de turistas internacionales al país llegaría a 34.5 millones al final del año, una cantidad 23 por ciento menor a lo registrado en el año anterior a la pandemia, es decir, en 2019. En el escenario pesimista, que contempla una duración más prolongada de la epidemia, la recuperación del flujo de viajeros de América del Norte sería más lento, pues en este año apenas llegarían 26.3 millones de turistas, una cifra 41 por ciento menor a los registrado en 2019. Braulio Arsuaga, presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET), calculó que la recuperación de este año no solo será gradual, sino baja y dependerá de las etapas de aplicación de las vacunas, que de alguna forma regresarán la confianza para viajar desde el extranjero y al interior del país. “La respuesta es que (este año) en la industria de viaje la recuperación será gradual y baja. (Este) año nos estaremos vacunando”, refirió Arsuaga. El plan de vacunación contempla 5 etapas, señaló el presidente del CNET e indicó que la cuarta etapa involucra a las personas de 40 a 49 años, es decir, a aquellos que tienen la posibilidad de pagar sus viajes y los de sus familias. “Pero al final habrá gente que no estará vacunada y estará con ese miedo de restricción de viaje”, señaló Arsuaga. Durante este año, los turistas provenientes de Estados Unidos vía aérea alcanzarán los 8 millones 571 mil, esto es tres millones 390 mil más que lo estimado en 2020 en el escenario optimista; el conservador, 6 millones 359 mil turistas, un millón 177 mil más que en 2020; en tanto que el pesimista sería de cinco millones 234 mil, apenas 51 mil 800 por arriba de 2020, que equivalen a un incremento de uno por ciento. Uno de los planes de la Secretaría de Turismo y de la Asociación de Secretarios de Turismo (Asetur) es aumentar la promoción de los destinos nacionales entre los ciudadanos estadounidenses, el mercado más importante y del que depende México para recuperar la entrada de divisas. Los esfuerzos, ante la poca participación de la federación, se han enfocado en promocionar destinos a través de alianzas locales: cada uno de los estados de vocación turística se concentraron en dar a conocer sus protocolos de seguridad y atractivos, sin embargo, la marca México se ha ido diluyendo en el imaginario de los turistas. Cabe destacar que a noviembre, la entrada de turistas provenientes del extranjero a México tuvo una caída del 45.6 por ciento anual, frente al penúltimo mes de 2019. En noviembre pasado, ingresaron al país 2 millones 90 mil 528 turistas internacionales, una cifra lejana a los 3 millones 844 mil 604 viajeros del mismo mes de 2019. |