Este año, la crisis sanitaria derrumbará 44 por ciento la llegada de turistas extranjeros, una caída nunca vista al menos desde 1980, cuando México comenzó a registrar esta actividad. Según proyecciones de la Secretaría de Turismo, a cargo de Miguel Torruco, la llegada de turistas internacionales cerrará este año con 25 millones de visitantes, frente a los 45 millones de 2019, cuando se registró una cifra récord en la afluencia de vacacionistas provenientes de Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Brasil y Francia, principalmente. Con la caída del 44 por ciento anual en este indicador, el país perderá a 20 millones de turistas provenientes de mercados internacionales, lo que equivale a la suma de las poblaciones de la Ciudad de México, Nuevo León y Jalisco, según previsiones de la Sectur. El brutal retroceso en la actividad turística no tiene ningún referente, dado que la caída más abultada ocurrió en 1997, cuando en el país vacacionaron 10 por ciento menos viajeros foráneos en comparación con el año previo. El cierre de fronteras, la disminución de vuelos y la interrupción temporal de las actividades en hoteles evitó que el flujo de viajeros se mantuviera. “El panorama es un poco complicado, este es un año perdido en cuanto a los números y un año de aprendizaje en cuanto a lo resiliente que es la industria turística”, afirmó Braulio Arsuaga, presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET). Cuando en marzo pasado se decretó la Jornada Nacional de Sana Distancia, nadie imaginó que la disminución en la movilidad se extendería hasta el fin del 2020. Nueve meses después, las plazas laborales ligadas a la ‘industria sin chimeneas’ disminuyeron 25 por ciento y se perderán 1.6 billones de pesos en consumo interno debido al bajo nivel de la actividad turística. “Lo que sucede es que perdimos la primera temporada importante del año, que es la de Semana Santa y Pascua. De allí no ha sido diferente con verano ni con invierno, porque al final de cuentas, no se está teniendo el volumen que se requiere para tener turismo”, lamentó Arsuaga. Brian Rodríguez, analista de aviación para Monex Casa de Bolsa, consideró que la recuperación de los viajes aéreos podría prolongarse hasta 2023, esto sin contemplar más cierres de fronteras debido a los altos niveles de contagio en regiones como Europa y América del Norte. “Para el cierre de año, contemplamos que el sector aéreo continuará con una recuperación paulatina, pero débil, ya que existe la posibilidad de entrar en semáforo rojo en algunos estados del país, lo que podría implicar retos en el corto y en el mediano plazo”, indicó el experto. Ante la amenaza de un daño mayor Braulio Arsuaga, el también director general de Grupo Presidente indicó que se debe mirar hacia los cinco años siguientes, en donde la inversión turística puede hundirse más y la infraestructura comience a deteriorarse. “Nos hemos centrado en el impacto de hoy, pero tenemos que evaluar esto con el impacto que va a tener en años venideros (…) al final de cuentas es mucho lo que se perderá, si el retorno se hará más largo, probablemente no sea tan atractivo invertir en turismo”, añadió. Jaime Salazar, presidente del Consejo Mexicano de la Industria de Reuniones (COMIR) explicó que el sector tiene pérdidas por 15 mil millones de dólares y se perfila hacia un sexenio perdido completamente. Los grandes centros de negocios, como Monterrey, Jalisco y la Ciudad de México no han podido reactivarse como los destinos de playa y están cada vez más cerca de volver al confinamiento que de acelerar sus recuperaciones. Un segundo cierre total del turismo será catastrófico para las pequeñas, medianas y grandes empresas que operan con ingresos menores en hasta un 80 por ciento comparados con el año anterior. Pese a un clima adverso, la Sectur no ha logrado impulsar una campaña de contención de crisis y se ha concentrado en la realización de pequeños eventos virtuales en los que los destinos se publicitan de forma individual. En esta situación se encuentran los estados del Bajío, quienes han conformado una alianza para promocionarse de forma coordinada, con el objetivo de atraer a los viajeros internacionales, sobre todo del segmento de reuniones y convenciones. Al respecto, José Juan Álvarez, secretario de Turismo de Guanajuato, indicó que la promoción conjunta permite dar una visión de los destinos más articulada e incentivar la llegada de turistas nacionales e internacionales. |