El regidor del ramo de Comercio, Emanuel Gómez aceptó que en el Centro Histórico de Orizaba, los músicos y cantantes sí podrán ejercer su libre expresión, siempre y cuando no cobren por esa actividad.

Visiblemente molesto por exponerle la recomendación 88/2020 que emitió la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) que manifiesta que cantar o tocar en el municipio de Orizaba no requiere ningún permiso, salvo que vaya a lucrarse con esa actividad, el edil señaló que “lo único que se quiere es una ciudad con orden, que de alguna manera siga por la ruta del desarrollo de la progreso sin llegar a caer en los municipios se tiene que es el desorden todos podemos expresarnos y sobre todo con una persona que canta”.

El regidor panista argumentó que esa prohibición de cantar en las calles del Centro Histórico se basa en el Reglamento Municipal de Comercio y que en Orizaba hay reglas claras.

“La finalidad de que alguien hace en la Madero, si es expresarse, puede expresarse libremente, pero si la cuestión es de recibir una remuneración, pues al final se está dando un servicio y tiene que tener un permiso, porque te voy a decir algo, al final de cuentas, se tiene una reglamentación en donde todos entramos”.

Cuestionado sobre ese reglamento de Comercio Municipal que reconoce que quien no lucre o cobre por servicios puede manifestarse con música o baile, el regidor admitió que es una “laguna” que tendrían que corregir en el Cabildo para que nadie interprete música o toque algún tipo de instrumento, ya sea que lucre o no.

“Es una laguna que tendríamos que ver precisamente como lo metemos en el Reglamento por eso es que el ayuntamiento para no entrar en sus conflictos trata de que siempre quien tenga que hacer algo o quiera hacer algo, pida un permiso”.

Sobre la recomendación que les emitió la CEDH de sancionar a los inspectores de Comercio por invocar artículos que no son los correctos y hostigar a los músicos, Emanuel Gómez aseguró que “en el catálogo que tienen los servidores públicos de Orizaba está el buen trato a la gente, todos los trabajadores del Ayuntamiento saben que el hecho de que cumplen sus funciones no les da el derecho de extralimitarse o de abusar y cualquier persona no necesita que se los diga, es algo que lo saben en cuanto toman protesta como servidores públicos y saben perfectamente que no necesitamos una recomendación de Derechos Humanos del Ayuntamiento, tienen que ser sancionados y corresponderá al Presidente Municipal y a la Directora de Recursos Humanos para saber qué sanciones se les imputarán”.