La violencia se apoderó del municipio de Rafael Delgado, lo que comenzó como una protesta pacífica, terminó en actos vandálicos que tuvieron que ser controlados por las fuerzas del orden. Tres automóviles quemados, una persona detenida, daños materiales incuantificables, saqueo de despensas y artículos de oficina, enfrentamientos entre presuntos delincuentes y policías estatales, fue el saldo que dejó la toma del Palacio Municipal de Rafael Delgado. Todo esto se originó debido a que no hubo solución al problema que generó la autoridad municipal al clausurar el panteón ejidal y eso llevó al cierre de la autopista en el tramo del trébol de Jalapilla en ambos sentidos y la carretera federal Orizaba-Zongolica. Se rompieron los sellos de clausura en el camposanto y se pidió levantar el movimiento, pero eso generó una inconformidad entre los pobladores porque no se cumplieron los demás puntos que se habían acordado. Cerca de las 8 de la noche, decidieron ir a manifestarse al Palacio Municipal, ahí se incendió una fogata. Después se irrumpió en el Salón de Usos Múltiples y encontraron despensas en cajas provenientes del DIF Estatal. Se hizo lo mismo en la bodega del DIF municipal donde se halló todo un cuarto lleno de ese apoyo alimenticio. Enardecidos los pobladores empezaron a causar destrozos al inmueble y cristalearon todas las oficinas. Con piedras de un gran tamaño comenzaron a vandalizar e ingresaron a las oficinas municipales para saquear desde computadoras, impresoras y otros artículos. Eso molestó a los vecinos de Jalapilla quienes reprobaron los actos. Llamadas al 911 reportaron los hechos vandálicos y fue necesaria la presencia de los efectivos de la Secretaría de Seguridad Pública. Al frente de la corporación, el Delegado por medio de un megáfono pidió dialogar con los líderes del movimiento pero fueron atacados a pedradas por un grupo de vándalos que fueron dispersados con gases lacrimógenos. Ya cerca de las 22:00 horas, se registraron enfrentamientos entre ambos grupos. Fue necesaria la presencia de policías estatales de Córdoba y de Orizaba para apoyar a sus compañeros que eran superados en número. Se registraron unos 5 enfrentamientos y los presuntos agresores incendiaron tres unidades; una ambulancia de traslado de Protección Civil, una camioneta Nissan estaquitas propiedad del director de Obras Públicas y una camioneta Pick Up doble cabina. Debido al incendio, las llamas alcanzaron la fachada de una humilde vivienda con techo de teja y las vigas que sostenían el tejado se incendiaron. Fue necesario pedir la pipa de agua para suministrar y apagar el fuego. A marchas forzadas, policías estatales y vecinos de la calle 2 y avenida 2 con cubetas, palas, mangueras sofocaron el fuego que consumió a los tres vehículos. Después de la media noche, los elementos de Córdoba regresaron a su base y el Palacio Municipal quedó bajo resguardo de la Policía Estatal adscrita a Ciudad Mendoza. |