El papa Francisco festejó hoy su cumpleaños con una fiesta protagonizada por niños que son atendidos en un Dispensario Pediátrico del Vaticano, durante la cual sopló una vela colocada sobre una pizza de cuatro metros. La mañana de este domingo en el Aula Pablo VI, el pontífice sostuvo un encuentro informal con pequeños y sus familias que le cantaron y lo felicitaron por sus 81 años. Tomando el micrófono, el pontífice improvisó algunas palabras: La alegría de los niños es un tesoro”, dijo. Francisco llamó a hacer todo lo posible para que continúen estando alegres. “Un alma alegre es como tierra nueva que hace crecer bien la vida, con buenos frutos. Y por esto se hace esta fiesta: se busca siempre la cercanía de la Navidad para reunirnos, para hacer fiesta con ellos”, dijo, hablando en italiano. “Cuiden la alegría de los niños. No los entristezcan, cuando los niños ven que hay problemas en casa y que los padres se pelean, sufren. No los entristezcan, deben crecer siempre con la alegría”, agregó. Más adelante señaló que para hacer crecer bien a los niños ellos deben hablar con los abuelos, porque son ellos quienes tienen la memoria y las raíces. Al mediodía, el Papa se asomó a la ventana de su estudio personal en el Palacio Apostólico para el rezo del Ángelus, y los 25 mil fieles presentes le cantaron el feliz cumpleaños en italiano (tanti auguri), que él agradeció efusivamente. En el centro de la Plaza de San Pedro, un grupo de jóvenes desplegó un cartel con la frase: “Tanti auguri santità” (Felicidades santidad). |