A partir de hoy se liberan en todo el país los precios de las gasolinas y el diesel, por lo que la Secretaría de Hacienda dejará de publicar los precios máximos de los combustibles.

Sin embargo, la dependencia anunció que mantendrá los estímulos fiscales en el impuesto a los combustibles con el fin de evitar variaciones abruptas en los precios.

"Si bien ya no se publicarán precios máximos de los combustibles, para el resto de 2017 y para 2018 se continuará amortiguando las variaciones abruptas en los precios de referencia y el tipo de cambio mediante el esquema de estímulos semanales al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS)”, explicó.

Para ello, la dependencia efectuó ajustes sobre la metodología del cálculo para determinar este estímulo fiscal, con la finalidad de hacerla consistente con el nuevo entorno de precios liberados.



SEGUIRÁ EL SUBSIDIO PESE A LA LIBERACIÓN
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público mantendrá los estímulos fiscales en el impuesto a gasolinas y diesel, a pesar de que a partir de hoy se liberan los precios de esos combustibles en todo el país.

La dependencia publicó en el Diario Oficial de la Federación que a partir del 30 de noviembre se liberan en todo el país los precios de las gasolinas y el diesel, por lo que dejará de publicar los precios máximos de los combustibles, como lo venía haciendo de manera diaria desde el 18 de febrero de 2017.

No obstante, la dependencia llevó a cabo ajustes sobre la metodología del cálculo para determinar este estímulo fiscal, con la finalidad de hacerla consistente con el nuevo entorno de precios liberados, que mitigue los efectos de la alta volatilidad de los precios internacionales de estos combustibles y del tipo de cambio.

Según la publicación, el cálculo se realizará tomando en cuenta las diferencias observadas en los periodos correspondientes, entre los precios base de las gasolinas y el diesel y los precios referentes de dichos combustibles.

El valor de los parámetros de ajuste podrá actualizarse con base en la evolución de las condiciones de mercado que sirvieron para determinar las diferencias observadas entre los precios base y los precios referentes”, detalló.

Aun así, recalcó que “estos cambios no modifican la mecánica de cálculo de los estímulos semanales al IEPS”.

Agregó que ayer se publicó el Decreto Presidencial que extiende la vigencia a 2018 tanto del estímulo general como del estímulo en la frontera norte, en sus mismos términos. El aplicado en la frontera norte ha permitido homologar parcialmente los precios en esa zona con los de las ciudades vecinas en Estados Unidos.

Mantener este esquema de estímulos fiscales a los combustibles en 2018 permitirá continuar con la transición ordenada al nuevo esquema de precios flexibles, evitando variaciones abruptas para el consumidor de una manera fiscalmente responsable, dijo.

La liberalización de los precios de las gasolinas y el diesel comenzó en marzo de este año, con el propósito de permitir la entrada de nuevos competidores al mercado y de esta manera generar competencia en el sector de los combustibles, ya que antes sólo existía un proveedor en el país, que era Petróleos Mexicanos.



BAJA 25% VENTA DE GASOLINA PREMIUM
La nueva política de precios de los combustibles originó una baja de 25.3% en la venta de gasolina Premium al cierre de octubre respecto al año pasado, de acuerdo con información de Petróleos Mexicanos (Pemex).

Esto significa que en los primeros meses de 2017 se vendieron 136 mil 400 barriles por día del combustible, 46 mil 100 menos que entre enero y octubre de 2016.

Dicha situación, tiene que ver con el aumento de 20.1 por ciento al precio de la gasolina Premium, que aplicó la Secretaría de Hacienda en enero pasado bajo el argumento de un impacto en los costos internacionales de los combustibles.

Desde entonces Hacienda ha aplicado costos máximos y mínimos en todo el país como un primer paso para el cambio radical en el mercado, pues a partir de marzo la Comisión Reguladora de Energía (CRE) comenzó con la liberación de los precios, cuyas etapas se completan hoy.

Así, en octubre pasado la venta de gasolina tipo Premium alcanzó su menor volumen, con apenas 126 mil 700 barriles, 31 por ciento menos que en el mismo mes del año pasado y en el que se alcanzó una comercialización de 183 mil 700 barriles.

Entre 2010 y 2011, la venta de este combustible se mantuvo estable, sin embargo, a partir de 2012 comenzó a incrementarse alcanzando un pico de más de 205 mil 800 mil barriles en diciembre de 2016, año en el que su precio era casi igual al de la Magna.

Pero a partir de los incrementos de enero pasado cambió esa tendencia pues la mayoría de los clientes ya tienen un uso más cuidadoso y selectivo del automóvil, lo cual tiene un impacto directo en las ventas al consumidor, afirman los gasolineros.

En el caso de la gasolina Magna, su comercialización en las casi 12 mil estaciones de servicio se ha mantenido relativamente estable este año, con un volumen de 653 mil 200 barriles, apenas 3.2 por ciento más que en 2016.

Según datos de Pemex, el diesel también registró una caída, de 4.6 por ciento.



DESCARTAN AUMENTOS DRÁSTICOS
Los expendedores de petrolíferos descartaron que la liberación de los precios de combustibles en todo el país, que rige a partir de hoy, lleve a incrementos significativos.

En entrevista, José Carlos Femat Romero, director general de la Organización de Expendedores de Petróleo (Onexpo), aseguró que la volatilidad en el precio de esos energéticos será sólo de centavos, ya sea a la alza o a la baja, tal y como se ha registrado en los estados donde ya se ha venido implementando este nuevo modelo.

Ello porque se prevé que los incentivos fiscales, que otorga el gobierno federal, “suavicen” el impacto de los ajustes de precios en los mercados internacionales.

La flexibilización de los mercados de gasolinas y diesel en México contemplaba cinco fases, de las cuales tres fueron ejecutadas en marzo, junio y octubre en once estados, de manera exitosa.

Por ello se decidió liberar los precios en los 23 estados restantes, la mayoría de ellos en el centro del país, y donde se concentra la mayor demanda a nivel nacional.

La liberación implica que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público ya no impondrá precios máximos ni mínimos, aunque mantiene un subsidio.