El Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) compartió el domingo imágenes de un cráter al interior del volcán Popocatépetl. El director general del Cenapred, Carlos Valdés González, informó que el cráter interior tiene un diámetro de 370 metros y 110 metros de profundidad y que es cuestión de días para que se tape.

Este cráter se trata de un sistema abierto que no está “taponeado”, lo cual explica la actividad que se observó el 23, 24, 26 y 27 de noviembre. “Se han formado fumarolas importantes, intensas, que han alcanzado entre 3 mil y 4 mil metros de altura, pero que además duran entre 1:15 horas y 1:45 horas", explicó Valdés.


La volcanóloga de la UNAM, Ana Lillian Martin del Pozzo, explica cuáles serían las implicaciones de esta nueva formación.

¿Es peligroso el cráter interno del Popocatépetl?

“Cuando el sistema está abierto es como si se tratara de una olla exprés a la cual la válvula de presión le funciona muy bien; incrementamos la presión, la válvula se levanta y permite la salida de material. Si nosotros tenemos una olla exprés que tenga la válvula de seguridad defectuosa, pues no se va a mover, va a estar taponeada y la presión de la olla exprés la va a romper y la va a aventar contra el techo y va a sacar todo por ahí, entonces la condición ahorita es de un sistema abierto que permite con regularidad la salida de presión del volcán”, aseguró Valdés.

Pero esto puede cambiar rápidamente por la naturaleza del volcán, desde que inició su actividad el 21 de diciembre de 1994, el volcán a lo que se dedica es a formar domos y después destruirlos. Los domos son verdaderos tapones de los cráteres y los despedaza el volcán y salen volando y desde ese 21 de diciembre, el volcán ha formado y destruido cerca de 77 domos, entonces estamos frente a una característica común del volcán”.

El director general del Cenapred enfatizó que esta formación interna siempre ha estado, no es un cráter nuevo ni es algo que se desconozca, siempre ha estado. "La única diferencia es que ahora el cráter interno que generalmente contiene un domo, material de lava llenándolo y que actúa como tapón, en este caso no lo tenía y pudimos apreciar claramente sus dimensiones”.

Para tener una idea más clara del cráter interno, Valdés González afirmó que el Estadio Azteca mide 200 x 200 metros de lado y su altura es menor a 75 metros, entonces fácilmente en ese cráter interior podrían caber dos Estadios Aztecas.

—¿Qué es lo que sigue?
“Lo que veremos es un incremento de presión y después la actividad de destrucción de los domos que son esas explosiones que lanzan fragmentos, pero a diferencia de las fumarolas que hemos visto en los últimos cinco días, las explosiones tendrán una corta duración, saldrán volando los fragmentos y su duración, a veces, se acorta a 5 minutos”.

—¿Qué motivó el sobrevuelo?
“Las emisiones que habíamos visto tanto el 23 como el 24 de noviembre nos llamaron la atención y parte de la vigilancia del volcán es de vez en cuando hacer estos sobrevuelos. A veces conseguimos imágenes satelitales, no siempre se puede y la resolución de la imagen no nos permite ver la precisión y la claridad con la que se observa en sobrevuelo, entonces cuando hay las condiciones de seguridad y el clima lo permite, lo hacemos y así pudimos tomar imágenes que son muy valiosas y es parte de las etapas del monitoreo que son cuatro: sísmico; de deformación; geoquímico, que es el análisis de cenizas, de los gases y de las fumarolas; y el monitoreo visual”.

—¿Cada cuándo se hace este monitoreo?
“El monitoreo es constante, hay gente las 24 horas en este laboratorio de monitoreo y también la otra parte es el emitir un reporte diario, pudiera ser que es el único volcán en el mundo del que se emiten reportes diarios. Por ejemplo, Colima emite un reporte semanal, varios de Perú los reportes son quincenales, en otros son mensuales.

Al Popocatépetl lo consideramos un volcán tan importante porque vivimos alrededor de él, en un radio de 110 kilómetros, entre 25 y 27 millones de personas, esto amerita que todos los días se esté haciendo un reporte, un diagnostico, para darle una continuidad muy precisa”.

—¿El Popocatépetl ha presentado actividad peligrosa?
“En el pasado ha tenido actividades eruptivas muy importantes, actividades grandes, nos lo dicen los geólogos, una actividad de hace 14 mil años y uno se preguntará: '¿como sabemos que ocurrió hace 14 mil años?' Y es por los vestigios que deja el volcán y que son posibles analizarlos por los expertos.

Ese ha sido el escenario más crítico, no nos encontramos ante unos de ellos, pero lo que si hay que reconocer es la vulnerabilidad de los seres humanos que vivimos cerca del volcán, pues aumenta porque simplemente una caída intensa de cenizas pone en jaque a las comunicaciones, vías de transporte y a la salud, todo este tipo de cosas, entonces hay que estar muy atentos. No necesitamos una actividad muy grande para poner en jaque a una gran cantidad de mexicanos que vivimos al rededor del volcán, por eso necesitamos conocerlo, saber qué hacer y de nuevo tomar en cuenta las recomendaciones”.

—¿Cuánto tiempo tardará en taparse este cráter interno?
“El domo más grande y más importante se formó en diciembre del año 2000 y fue un domo de 19 millones de metro cúbicos y se formó en 36 horas. Eventualmente aquel domo comenzó a ser despedazado por la actividad volcánica que comenzó el 18 de diciembre y finalmente culminó con una actividad importante el 22 de enero del año 2001 con una gran explosión. Un gran domo implica, eventualmente, una etapa de destrucción que puede ser sería y complicada y eso es lo que vigilamos. Este cráter interior, debido a la actividad del volcán, creo que tardará cuestión de días en taparse”.