En lo que va del 2019, ya se registró el primer secuestro de un centroamericano, en el sur de Veracruz.

Joel Ireta Munguía, encargado de la Pastoral de Movilidad Humana de la Diócesis de Coatzacoalcos, declaró que la víctima logró escapar de sus captores y se le brindó refugio en la casa del migrante.

Expuso que el masculino presentaba diversas lesiones en el cuerpo, provocadas por arma punzocortante y que incluso estuvo a punto de perder una de sus extremidades.

“Llegó a la casa del migrante muy herido, estuvo a punto de perder la pierna, porque hubo mucho tiempo que no se le trató, pero bendito Dios estuvo tres semanas, se rehabilitó y ya se regresó a su país”, comentó.

El sacerdote manifestó que el municipio de las Choapas es la zona donde los indocumentados han sido más víctimas de hechos violentos.

Tan sólo en esta semana, más de 90 indocumentados han llegado a la casa del migrante, en donde hacen una pausa para posteriormente continuar su camino hacia el llamado sueño americano.

“Durante el camino se encuentran con todo tipo de situaciones, hay personas que de aquí mismo de México los han agredido, pero algunos vienen siendo perseguidos desde Honduras”, manifestó.

En este año, alrededor de 10 centroamericanos han solicitado información para tener el estatus de refugiado en México y así se les facilite llegar hacia los Estados Unidos.